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28 días a casa por tirarle un portátil a la cara a un profesor

Iniciado por toroloco, 21 Noviembre, 2016, 21:13:26 PM

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toroloco

Una menor lanza un portátil a su profesor en Loja por quitarle el móvil en clase

La dirección del centro ha expulsado a la alumna durante 28 días, el máximo tiempo que permite el reglamento

El docente está de baja tras sufrir una luxación a consecuencia de la agresión

    EUROPA PRESSGranada

21/11/2016 18:14

Una alumna de un instituto de Loja (Granada) ha sido expulsada durante 28 días, lo máximo que permite el reglamento del centro, por amenazar y agredir a un profesor al que tiró un portátil al rostro por quitarle el móvil cuanto estaban en el aula.

Los hechos ocurrieron hace unos días, cuando la menor se encontraba haciendo grabaciones con el móvil durante una clase, lo que motivó que el docente se lo quitara, según han detallado a Europa Press fuentes de la Delegación Provincial de Educación.

La joven, que estudia la ESO, reaccionó amenazando al profesor si no le devolvía el celular y acabó por coger un portátil y arrojárselo a la cara, lo que ha provocado al docente una "luxación" que le mantiene de baja.

El Servicio de Inspección Educativa ha abierto un expediente para investigar el asunto junto al centro, que ha expulsado a la joven durante lo máximo que le permite el reglamento, 28 días.

Igualmente, se analizará la idoneidad de cambiarla de centro educativo tras lo sucedido, que también motivó una reunión entre la dirección, los padres y la alumna, la cual se ha disculpado por su comportamiento, según han añadido las mismas fuentes.

El delegado de Educación de la Junta en Granada, Germán González, ha condenado lo sucedido contra este docente, con el que ya se ha puesto en contacto poniéndose a su servicio en lo que pueda necesitar.


jmcala

Ese compañero debería denunciar a la menor y pedir una orden de alejamiento. Si no se concede esa media, exigir seguridad privada si la menor vuelve al centro o negarse en redondo a estar en el aula con ella.


Profesor

Cita de: jmcala en 21 Noviembre, 2016, 21:23:11 PM
Ese compañero debería denunciar a la menor y pedir una orden de alejamiento. Si no se concede esa media, exigir seguridad privada si la menor vuelve al centro o negarse en redondo a estar en el aula con ella.


"Pobre cría. Al fin y al cabo es una menor y nosotros somos los adultos. No creo que denunciar esos caso sea la medida más correcta para la alumna, y sus padres los pobres no tienen culpa y me dan pena"




Esto o similar lo he escuchado muchas veces. Cada vez que ha pasado algo siempre pasa lo mismo y siempre digo lo mismo: denuncia hasta las últimas consecuencias y sin aflojar lo más mínimo. Pero nada.

toroloco

Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal.

CAPÍTULO II
De los atentados contra la autoridad, sus agentes y los funcionarios públicos, y de la resistencia y desobediencia

Artículo 550

1. Son reos de atentado los que agredieren o, con intimidación grave o violencia, opusieren resistencia grave a la autoridad, a sus agentes o funcionarios públicos, o los acometieren, cuando se hallen en el ejercicio de las funciones de sus cargos o con ocasión de ellas.

En todo caso, se considerarán actos de atentado los cometidos contra los funcionarios docentes o sanitarios que se hallen en el ejercicio de las funciones propias de su cargo, o con ocasión de ellas.

2. Los atentados serán castigados con las penas de prisión de uno a cuatro años y multa de tres a seis meses si el atentado fuera contra autoridad y de prisión de seis meses a tres años en los demás casos.

3. No obstante lo previsto en el apartado anterior, si la autoridad contra la que se atentare fuera miembro del Gobierno, de los Consejos de Gobierno de las Comunidades Autónomas, del Congreso de los Diputados, del Senado o de las Asambleas Legislativas de las Comunidades Autónomas, de las Corporaciones locales, del Consejo General del Poder Judicial, Magistrado del Tribunal Constitucional, juez, magistrado o miembro del Ministerio Fiscal, se impondrá la pena de prisión de uno a seis años y multa de seis a doce meses.

Artículo 550 redactado por el número doscientos cuarenta del artículo único de la L.O. 1/2015, de 30 de marzo, por la que se modifica la L.O. 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal («B.O.E.» 31 marzo).Vigencia: 1 julio 2015




mestizo

Cita de: jmcala en 21 Noviembre, 2016, 21:23:11 PM
Ese compañero debería denunciar a la menor y pedir una orden de alejamiento. Si no se concede esa media, exigir seguridad privada si la menor vuelve al centro o negarse en redondo a estar en el aula con ella.
Esto de la seguridad privada me parece muy bien, pero que cuando esa menor sea mayor y empiece a trabaja, que no cobre nada hasta haber abonado el coste de la seguridad privada.
En 1873 SE PROCLAMO LA I REPUBLICA ESPAÑOLA, y pocos meses después se declaran repúblicas independientes, Valencia, Málaga, Alcoy, Bailén, Cádiz, Sevilla, Torrevieja, Tarifa, Almansa, Andújar, Cartagena, Cataluña, Granada, Motril, Salamanca, Jumilla o Camuñas.

Por si fuera poco, Granada declara oficialmente la guerra a Jaén, Cartagena bombardeó el puerto de Alicante con la fragata Vitoria y se anexiona Torrevieja arrebatándosela a Alicante, aunque Torrevieja ya era una república independiente, mientras Jumilla declara la guerra a Murcia.

Parece una broma pero hubo cientos de muertos.
NO A UN REFERÉNDUM SEPARATISTA E ILEGAL.Y que si lo pierden pedirán otro y otro hasta que ganen uno.

jmcala

Quizás no habría que esperar tanto. Se podría pedir a los padres que pagaran esa seguridad.

La clave está en hacer que los padres se impliquen. Hay cierto tipo de adolescentes que están abandonados por sus padres: bien sea por motivos laborales o por incompetencia manifiesta. Desde los centros educativos debemos exigir la obligación legal que tienen, dado que los políticos no están por la labor.

mifunecadi

Pongo la misma noticia en otro enlace para añadir más datos que me parecen de interés:
http://www.diariosur.es/sociedad/educacion/201611/21/expulsan-menor-granada-agredir-20161121132540-rc.html

En mi opinión, hay que distinguir el reglamento del centro de las responsabilidades civiles y penales. El centro ha adoptado el castigo máximo, 28 días de expulsión, y finalmente se confirma en esta última noticia que pasa a ser escolarizada en otro instituto, con lo que el reglamento del centro se ha aplicado incluso con dureza. ¿Llega hasta ahí la responsabilidad por lo sucedido? Ni de broma, este caso por su gravedad excede claramente el reglamento del centro y debería ser juzgado por la justicia ordinaria para reparar los daños físicos y psicológicos causados al docente, pero entonces es cuando nos tropezamos con el buenismo de nuestra sociedad:

Cita de: Profesor en 21 Noviembre, 2016, 22:02:17 PM
"Pobre cría. Al fin y al cabo es una menor y nosotros somos los adultos. No creo que denunciar esos casos sea la medida más correcta para la alumna, y sus padres los pobres no tienen culpa y me dan pena"
Esto o similar lo he escuchado muchas veces. Cada vez que ha pasado algo siempre pasa lo mismo y siempre digo lo mismo: denuncia hasta las últimas consecuencias y sin aflojar lo más mínimo. Pero nada.

Y me llama mucho la atención algo que se dice en este último artículo: "Aunque el docente afectado no ha querido denunciar los hechos y el centro ha respaldado su decisión, lo ocurrido ha trascendido a la opinión pública en los últimos días". O sea, no solo no denuncia el profesor, sino que la directiva lo apoya en esa decisión. Te parten la cara literalmente, pero oye, que no es necesario acudir a la justicia a que se te compense por el mal causado. Y ahí es donde le hemos dado la vuelta a la tortilla, porque la menor es una pobre chica de una familia que difícilmente va a poder hacerse cargo de las responsabilidades civiles derivadas de la actuación de su hija, así que el profesor debería ser "buena gente", comprender que las operaciones que va a sufrir a partir de ahora y el miedo a entrar en una clase en el futuro son pequeños daños colaterales, cosas de críos. Y al final acabamos convirtiendo al profesor en víctima por segunda vez, porque vuelve a ser el único que sufre las consecuencias de lo que ha pasado, y naturalmente todo esto ocurre con la connivencia de la dirección, que bajo el amparo que le da cumplir el reglamento se alegra del escándalo evitado al no haber denuncia. Vamos, que si no llega a ser porque alguien ha filtrado la información a los medios a estas alturas ya sería todo agua pasada.
¿Tiene solución todo este despropósito? Sí, establecer un protocolo para que los centros informen de cualquier agresión o intento de agresión (no creo que la mayor o menor puntería sea lo que indique la gravedad del caso) y a partir de ahí actuar de oficio. ¿Se hará algo así entonces? No, porque el grueso de la sociedad se identifica con los pobres padres a los que le ha salido una hija rebeldona, algo que podría pasarle a cualquiera (con la dejación de funciones de un amplio porcentaje de los padres actuales, efectivamente, podría ser la hija de cualquiera) y el profesor en cambio es visto como un privilegiado con muchas vacaciones que hace algo que sabe hacer cualquiera, así que si hay un resquicio legal que permite que estos "problemillas" acaben quedando en nada, casi mejor dejarlo como está. Y así nos va.

rents

Un compañero me contó que en el primer día en ese instituto de Loja donde ha sucedido esto le tiraron un condón a la cara y no pasó absolutamente nada porque la directiva no tuvo muchas ganas de investigar quién lo había tirado y nadie reconoció haberlo hecho.

Normalmente, cuando un portátil aterriza en la cara de un docente han pasado muchas cosas antes y muy poco remedio se ha puesto para evitarlas.

Por último, yo tuve noticia de esto por un whatsapp hace días en el que el claustro protestaba porque la directiva no hiciera nada ni le pusiera castigo alguno a la alumna. Parece ser que en cuanto saltó a la luz pública ya hubo quien se puso las pilas. A buen entendedor no tendré que explicarle lo que ha pasado aquí.

Mi total solidaridad con el compañero agredido. Tolerancia Cero con la violencia en las aulas, sea quien sea la víctima.


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