¡CUIDAMOS LA PÚBLICA!

'

Partido X. El partido del futuro.

Iniciado por Dru, 10 Abril, 2013, 22:27:37 PM

Tema anterior - Siguiente tema

0 Miembros y 1 Visitante están viendo este tema.


respublica

A ese partido le falta fichar a José Mota u otro cómico para intentar emular al Movimiento 5 Estrellas italiano de Beppe Grillo.

Pero al menos el Movimiento 5 Estrellas tiene un programa basda en esas 5 estrellas que designan las políticas fundamentales del partido: agua pública, transporte, desarrollo, conectividad y medio ambiente.


Y si miramos al detalle de su programa nos encontramos:

Una WikiLegislación nunca debe partir de cero. Siempre parte de un borrador elaborado por ciudadanos y personas expertas en el tema (sea por iniciativa del gobierno o de la ciudadanía) que han recopilado previamente el conocimiento existente sobre una determinada cuestión.

¿Quién decide qué personas son expertas en un tema? ¿Qué se hace cuando, como sucede siempre, unos expertos dicen una cosa y otros la contraria? ¿Si la gente no es experta, cómo va a opinar con el más mínimo criterio?


Así que me parece que el Partido X es de 1 única estrella: la conectividad, que es lo mismo que no decir nada, y todo para arrancar un puñado de votos a quienes sí tienen algo que decir.


Saludos.

- Cuando todos piensan igual, ninguno está pensando -


Albariza

Cita de: respublica en 12 Abril, 2013, 15:25:11 PM
y todo para arrancar un puñado de votos a quienes sí tienen algo que decir.

A mí tampoco me gustan demasiado este tipo de organizaciones que aparecen de pronto de no se sabe dónde. Me inspiran poca confianza (quizá porque yo sea de por sí desconfiada). Y pienso que son flor de un día, entre otras cosas porque les falta la cultura política suficiente como para plantear alternativas de cierta entidad.

Pero, compañero Respublica, los votos no son propiedad de nadie, así a priori. Y el derecho a tener algo que decir tampoco. De hecho, los que ya están en la escena política tendrán mucho que decir, pero hacer hacen poco. O al menos no hacen lo que dicen. Ni lo que deberían hacer.

Un saludo.
La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para qué sirve la utopía? Para eso, sirve para caminar.

respublica

Estos sí que tienen algo que decir.






- Se constituye en Sevilla una "Asamblea ciudadana" con el horizonte de concurrir a las elecciones y desbancar al poder constituido.

- Juan Torres (ATTAC), los abogados Jose Ignacio Aguilar (Intercomisión Vivienda 15M) y Juan Moreno Yagüe (Democracia 4.0), Antonio Losada (ex secretario general de CGT Sevilla), Federico Noriega (Asambleas Ciudadanas Constituyentes y Ecologistas en Acción), la profesora de Ciencias de la Información María Lamuedra (Universidad del Bien Común) y Esteban de Manuel (Coordinador de EQUO Andalucía).


María Iglesias





El Salón de actos de la Facultad de Económicas de la Universidad de Sevilla acogió el viernes 8 de marzo una reunión de cien personas que se proponen unir a ciudadanos y movimientos sociales indignados con la coyuntura política y socioeconómica para "promover el tránsito a una nueva etapa democrática", con el horizonte, para conseguirlo, de presentarse a próximas citas electorales. 

El centenar de asistentes a la asamblea acudió por convocatoria de una treintena de activistas que se reunieron el 21 de febrero en la Casa de las Sirenas sevillana, entre ellos miembros de 15-M, ATTAC, Democracia Real Ya, Foro Social, Democracia 4.0, En Lucha, SAT, Ecologistas en Acción, de los partidos I-Anticapilatista, Primavera Andaluza y CUT-BAI y también representantes de formaciones políticas como IU o EQUO.

"Nuestra pretensión es bastante clara y simple: queremos promover un gran acuerdo de ciudadanía desde la base social, en torno a una serie de medidas básicas que permitan frenar la agresión neoliberal y modificar el marco institucional de corrupción y falta de derechos en el que estamos , y todo ello construyendo órganos estables de poder popular de amplia base democrática capaces de colaborar con las luchas de resistencia y con la satisfacción de las necesidades humanas básicas y constituyendo candidaturas electorales de ciudadanía, fruto de nuevos tipos de participación social y bajo un nuevo contrato social de representación que someta siempre a los elegidos al poder de la ciudadanía que lo mandata".

Es la síntesis de la convocatoria de asamblea que firmaron a título personal 29 activistas, entre ellos el Catedrático de Economía Aplicada Juan Torres (ATTAC), los abogados Jose Ignacio Aguilar (Intercomisión Vivienda 15M) y Juan Moreno Yagüe (Democracia 4.0), Antonio Losada (ex secretario general de CGT Sevilla), Federico Noriega (Asambleas Ciudadanas Constituyentes y Ecologistas en Acción), la profesora de Ciencias de la Información María Lamuedra (Universidad del Bien Común) y Esteban de Manuel (Coordinador de EQUO Andalucía).

De las instituciones municipales a las europeas

"Hay que reiniciar la democracia -aseguró De Manuel-. Nos encontramos en una situación de emergencia y tenemos que estar a la altura. Para cambiar los cimientos, para no estrellarnos, tenemos que acceder al poder". Su compañero del grupo de siete que presidía la asamblea, Juan Antonio Marcos, investigador de la Facultad de Económicas, planteó ganar "pueblo a pueblo, ciudad a ciudad para, en el futuro, agregarse a una estructura autonómica, nacional y europea". Pero De Manuel fue tajante: "La escala local tiene un potencial enorme para resolver problemas y poner en práctica un nuevo sistema pero no podemos salir hoy de aquí sólo con el horizonte de las municipales, sino con la idea de alcanzar el objetivo antes de que culmine la legislatura y con el horizonte estatal y europeo, porque si no disparamos a la Troika no resolveremos nada".

La iniciativa incluye contar con partidos políticos y sindicatos. "Sin la gente que está en los partidos y sindicatos -declaró el coordinador de EQUO-A- no tendremos la mayoría social que necesitamos para lograr el cambio". Federico Noriega ahondó en esa línea: " En las próximas elecciones va a haber candidaturas ciudadanas porque es una situación de emergencia nacional. Éste es el viento de la historia y quien se oponga a él será barrido como ya lo han sido los partidos comunistas y socialistas tradicionales en Grecia e Italia".
"No son ideas ni de izquierdas ni de derechas, sino de gente honesta"

Juan Torres fue uno de los más vehementes: "No despreciamos a los partidos pero esto tiene que ser otra cosa. Hay que movilizar al 60 o 70% de la sociedad para sortear el inminente peligro de caer en manos del fascismo. Para recuperar la democracia secuestrada tenemos que ir a un programa de mínimos: que la Constitución deje de ser papel mojado, reformarla para que las Iniciativas Legislativas Populares no se bloqueen sistemáticamente, una ley electoral justa que no favorezca a PP, PSOE y nacionalistas, parlamentarios que hayan trabajado y no sido políticos toda su vida, una fiscalidad justa, que el que robe o haga negocio con la deuda pública vaya a la cárcel aunque sea rico. Esas ideas no son ni de izquierdas ni de derechas, sino de gente honesta. Tenemos que convencer a una mayoría social, concurrir a las elecciones unidos, y ganarlas".

Los convocantes de la asamblea explicaron que su objetivo es "una alianza transitoria, un tránsito hacia un nuevo sistema democrático". Tras el cual cada persona o grupo, según su ideología, defenderá sus ideas en otros partidos que surgirán en la nueva etapa democrática.

Para alcanzar el objetivo de hacer crecer el proyecto, Juan Torres propuso a los cien asistentes convertirse en "un nudo de red". "Si cada uno nos comprometemos a convencer a diez personas en un mes seremos mil y si esos mil hacen lo mismo articularemos una marea imparable".

Creación de un órgano ejecutivo: la coordinadora

Pese al deseo común de los asistentes de desalojar el poder establecido y articular una alternativa, los enfoques expuestos el viernes eran heterogéneos (incluso contrarios en ciertos puntos, pues si bien algunos proponían crear "Agrupaciones de electores" para presentarse a las municipales, otros advertían que esa fórmula nunca logrará una victoria nacional).

Las discrepancias tienen que ver con el contenido ideológico del mismo y con la forma de vertebrar la unión de todos. Para armonizar esa diversidad se planteó crear una coordinadora de la que formarán parte cuantos lo deseen y asistan a una reunión que se celebrará antes del 22 de marzo, en lugar y fecha decidido vía redes sociales por los asistentes a la Asamblea 8-M.

La coordinadora se centrará en tres objetivos: autoproclamación ("el primer paso para cambiar las cosas es reconocernos como actores, mirarnos al espejo y decir aquí estamos, esto podemos y vamos a cambiarlo", argumentó Federico Noriega), creación de grupos de trabajo para elaborar un programa de mínimos que pueda asumir esa mayoría social del 60%, y elección del día para la presentación pública de la iniciativa a la ciudadanía.

"Mi propuesta es -expuso el coordinador de EQUO, Esteban de Manuel-crear candidaturas en las ciudades y promover un plebiscito popular sobre la dimisión de Gobierno, la creación de un Gobierno de Transición y la celebración de elecciones constituyentes con una ley electoral y unas listas justas".

El impulso, en este preciso momento, de este movimiento -llamado provisionalmente "Asamblea ciudadana de Sevilla"- no es casual. Sus promotores reconocen que se trata de un paso más tras "las iniciativas de convergencia social que están dándose en nuestra ciudad como las Mareas, el Bloque Crítico y el 15M". Y es que, de hecho, parece haber tenido un papel destacado el que asambleas de 15 M hayan difundido en enero un manifiesto en el que proponen "coordinar un frente común" y "preparar el asalto electoral de la ciudadanía a todas las instituciones políticas".

Referentes: Grecia, Islandia e Italia

En la mente de todos está el sorpasso de Syriza al PASOC en Grecia, el hundimiento en Islandia de los partidos tradicionales ante una coalición cuyo punto programático era la reforma de la Constitución para la regeneración política, y la recientísima victoria electoral en Italia -como partido más votado tras las coaliciones de izquierda y derecha- del Movimiento 5 Estrellas de Beppe Grillo creado sobre un programa de cinco ideas: agua pública, transporte, desarrollo, conectividad y medio ambiente.

"Aunque sobre el papel pudiéramos tener mucho en común con el M5E por la crítica al funcionamiento del sistema y la corrupción, nuestra propuesta política nace de modo diametralmente opuesto -explica Federico Noriega. No desde un hombre de personalidad arrolladora sino de muchos ciudadanos y colectivos movilizados". Si bien ni él ni Juan Torres descartaron que, a medida que crezca el movimiento, surjan una o varias figuras de liderazgo, con el referente en su imaginario de gente como Ada Colau de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca.

Queda aparcado de momento "por prematuro" el tema del líder o de las siglas. José Ignacio Aguilar (Intercomisión viviendas 15M) se refirió más bien a "pequeños liderazgos": "el punto de arranque obligado es contar con una masa crítica que se considere capaz de impulsar el proyecto, que recoja personas de distintos sectores de la ciudad, con pequeños liderazgos. Partir sin esa masa crítica sería un error grave, nos condenaría al fracaso".
El reto de sumar a Izquierda Unida

Sí se tiene en cuenta ya la necesidad de evitar un fraccionamiento de la oposición a las políticas neoliberales imperantes. A este respecto, la duda que no quedó despejada en la asamblea es cuál será el posicionamiento de Izquierda Unida, uno de cuyos miembros en el comité provincial, Javier García, está entre los firmantes de la Asamblea 8M.

"Izquierda Unida tiene que plantearse -expuso el catedrático Juan Torres- si en una situación de emergencia nacional como la actual se conforma con entre un 15 y un 25% de respaldo popular, en el mejor de los escenarios por ellos imaginados. Con ese apoyo no se puede llegar al poder y revertir la situación". En opinión de Torres y citando a Manuel Castells "hay que promover la revolución, que no es partirle la cabeza a la gente sino hacer cambios no previstos. Revolución democrática frente a la conservadora que iniciaron hace 30 años Thatcher y Reagan y que ha llegado a episodios como el cambio de presidentes por la UE en Grecia e Italia sin contar con los ciudadanos, o el secuestro de la Constitución en España, volviéndola rígida, enlatada".

En paralelo al cierre de una fecha anterior al 22 de marzo para la reunión de la Coordinadora, sus impulsores afirman que celebrarán encuentros de coordinación con iniciativas parecidas en el resto de Andalucía y España, con reuniones ya previstas en Madrid, Valencia y Tenerife.

- Cuando todos piensan igual, ninguno está pensando -


Albariza

Cita de: respublica en 17 Abril, 2013, 18:28:05 PM
Estos sí que tienen algo que decir.

- Juan Torres (ATTAC), los abogados Jose Ignacio Aguilar (Intercomisión Vivienda 15M) y Juan Moreno Yagüe (Democracia 4.0), Antonio Losada (ex secretario general de CGT Sevilla), Federico Noriega (Asambleas Ciudadanas Constituyentes y Ecologistas en Acción), la profesora de Ciencias de la Información María Lamuedra (Universidad del Bien Común) y Esteban de Manuel (Coordinador de EQUO Andalucía).


Te podría hablar de algunos de ellos. De conversaciones directas que he tenido con algunos de ellos. Del hacer en el día a día de algunos de ellos y de sus verdaderos intereses. Algunos saldrían mejor parados que otros, te lo aseguro. Pero sí, veamos qué dicen. Y sobre todo qué hacen.

En cualquier caso, sigo pensando que no tienen más qué decir algunas de esas personas que citas (y te repito que las conozco bien) que cualquiera de las personas que aparecían en los videos del mensaje que inicia el hilo. Eso del "pedigrí político" es algo en lo que hace tiempo que no creo. Sobre todo de quien solo lo usa para salir en la foto e ir detrás de la pancarta de cabecera.

Con todos mis respetos para ti. Y para Juan Torres y el coordinador de Equo, que también merecen todos mis respetos. Especialmente el primero.

Pero el mundo se cambia en la calle, en los barrios, en los centros de trabajo, a pie de tajo... no desde el estrado.
La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para qué sirve la utopía? Para eso, sirve para caminar.

respublica

Cita de: Albariza en 17 Abril, 2013, 23:10:53 PM
Pero el mundo se cambia en la calle, en los barrios, en los centros de trabajo, a pie de tajo... no desde el estrado.

Lo que dices es cierto, pero al igual que para el ejército del cambio es imprescindible el personal de tropa, lo es también el mando intermedio y sobre todo los grandes pensadores y líderes, que fijen estrategias y planes a corto plazo, y para eso es más efectivo el estrado.

O dicho de otra manera, los cambios no surgen por generación espontánea, sino que son la consecuencia de una decidida labor fruto de una buena organización política.

Quizás pienses que es mejor la autogestión, es decir, que es más efectivo el anarquismo o anarcosindicalismo que el socialismo o comunismo, pero francamente, en los tiempos que corren, mi opinión es que esos debates hace decenios que dejaron de ser útiles a la causa del cambio de sistema político y económico, aunque igual estoy equivocado y puede que todos lo estemos, pues cada vez estamos peor.


Saludos.

- Cuando todos piensan igual, ninguno está pensando -

respublica


  • Ex director de la edición francesa de 'Le Monde diplomatique' y profesor de Teoría de la Comunicación, es uno de los observadores más lúcidos de la realidad política.

Manuel Fernández-Cuesta


Ignacio Ramonet (Redondela, 1943), es uno de los pensadores más lúcidos de los últimos tiempos. Instalado en París desde 1972, sociólogo y semiólogo, especialista en geopolítica, profesor de Teoría de la Comunicación, sagaz periodista, su forma de mirar e interpretar la modernidad y, por extensión, la globalización, hace de sus ideas un punto de inflexión necesario contra el pensamiento dominante. Diario Kafka ha hablado con él sobre la actualidad política, la crisis y los emergentes movimientos sociales, Europa y el porvenir.


Diario Kafka: ¿Asistimos a un renacimiento de los movimientos de protesta ciudadana?

Ignacio Ramonet: Desde que estalló la actual crisis financiero-económica, en 2008, estamos asistiendo a una multiplicación de los movimientos de protesta ciudadana. En primer lugar, en los países más afectados (Irlanda, Grecia, Portugal, España), los ciudadanos –cívicamente– apostaron por apoyar, con sus votos, a la oposición, pensando que esta aportaría un cambio de política tendente a menos austeridad y menos ajuste. Pero cuando todos estos países cambiaron de Gobierno, pasando de la izquierda o centro-izquierda a la derecha o centro-derecha, la estupefacción fue completa, ya que los nuevos Gobiernos conservadores radicalizaron aún más las políticas restrictivas y exigieron más sacrificios, más sangre y más lagrimas a los ciudadanos. Ahí es cuando empiezan las protestas. Sobre todo porque los ciudadanos tienen ante sus ojos los ejemplos de dos protestas con éxito: la del pueblo unido en Islandia y la de los contestatarios que tumban las dictaduras en Túnez y Egipto. Además, destaca el hecho de que las redes sociales están facilitando formas de la organización espontánea de las masas sin necesidad de líder, de organización política, ni de programa. Todo está listo entonces para que surjan, en mayo de 2011, los indignados españoles, y que su ejemplo se imite de un modo u otro en toda la Europa del sur.

DK: ¿Por qué los partidos políticos de la izquierda son mal comprendidos por estos movimientos?

IR: Porque lo que los medios califican de "partidos políticos de la izquierda" tienen, en opinión de esos movimientos y de las mayorías exasperadas, muy poco de izquierda. No hay que olvidar, además, que estos partidos están comprometidos con esta misma política conservadora que ellos fueron los primeros en aplicar, sin anestesia. Recuérdese lo que ocurrió en España cuando, de pronto, en mayo de 2011, Rodríguez Zapatero, sin avisar ni explicar, decidió aplicar un brutal plan de ajuste ultraliberal que era exactamente lo contrario del ADN del socialismo.

DK. ¿Cuál fue el pecado original de Mayo del 68? ¿Son los movimientos de hoy hijos tardíos del 68? ¿Cree que pueden realmente construir contrapoder político, alternativa real de Gobierno, o son más bien movimientos emocionales?

IR: No se pueden comparar las dos épocas. Mayo del 68 era una crisis contra un país en expansión (nacimiento de la sociedad de consumo, crecimiento alto, pleno empleo), que seguía siendo profundamente conservador y hasta arcaico en materia de costumbres. Hoy sabemos que fue menos una crisis política que una crisis cultural. El movimiento del 15M, sin embargo, es el reflejo del derrumbe general de todas las instituciones (Corona, justicia, Gobierno, oposición, Iglesia, autonomías...). En ese sentido, es lo más positivo que ha ocurrido en la política española desde el final del franquismo. Lo más fresco e innovador. Aunque no se ha traducido en movimiento político con perspectivas de conquistar el poder, revela un sentimiento profundo de hartura de la sociedad española golpeada por la crisis y por las brutales medidas de austeridad del Gobierno de Mariano Rajoy. Se podría decir que los movimientos de protesta son una buena noticia ya que demuestran que las sociedades europeas, y en particular su juventud tan castigada por la crisis social, está expresando su descontento general hacia la situación que se está viviendo y hacia el tipo de solución neoliberal que los Gobiernos y la Unión Europea están aplicando contra la crisis. Es más, estos movimientos rechazan la adopción de medidas de austeridad extremadamente serias, de ajuste económico, en una Europa del sur donde más del 20% de los jóvenes menores de treinta años se encuentra en paro. Curiosamente, esta juventud se expresa de una manera pacífica, no violenta, inspirándose en varios movimientos generales.

DK: ¿Qué otros efectos está produciendo esta crisis en Europa?

IR: La crisis se está traduciendo también en un aumento del miedo y del resentimiento. La gente vive en estado de ansiedad y de incertidumbre. Vuelven los grandes pánicos ante amenazas indeterminadas como pueden ser la pérdida del empleo, los choques tecnológicos, las biotecnologías, las catástrofes naturales, la inseguridad generalizada. Todo ello es un desafío para las democracias, porque ese "terror difuso" se transforma a veces en odio y repudio. En varios países europeos, ese odio se dirige hoy contra el extranjero, el inmigrante, el diferente, los otros (musulmanes, gitanos, subsaharianos, sin papeles...) y crecen los partidos xenófobos, racistas y de extrema derecha.

DK: ¿Son los movimientos sociales y políticos actuales, culminando en el 15M, capaces superar a los partidos políticos tradicionales de la izquierda?

IR: No sabemos hacer política sin partidos políticos. Lo que reclaman los contestatarios, los indignados en casi toda Europa del sur, es cambiar las reglas del juego: desmontar el truco. Nuevas reglas supondrían, por ejemplo en España, una nueva Constitución como reclama un número cada vez mayor de ciudadanos. Una Constitución que dé más poder a los ciudadanos, que garantice más justicia social y que sancione a los responsables del actual naufragio. Un naufragio que no puede sorprender a nadie. El escándalo de las hipotecas basura era sabido por todos. Igual que el exceso de liquidez orientado a la especulación, y la explosión delirante de los precios de la vivienda. Nadie se inmutaba, porque el crimen beneficiaba a muchos. Y se siguió afirmando que la empresa privada y el mercado lo arreglaban todo. En la historia larga de la economía, el Estado ha sido siempre un actor central. Solo desde hace treinta años –o sea, nada en una historia de siglos–, el mercado ha querido expulsar al Estado del campo de la economía. Hay que volver al sentido común, a un keynesianismo razonable: tanto Estado como sea necesario y tanto mercado como sea indispensable. La prueba evidente del fracaso del sistema neoliberal actual son los ajustes y rescates que demuestran que los mercados no son capaces de regularse por sí mismos. Se han autodestruido por su propia voracidad. Además, se confirma una ley del cinismo neoliberal: se privatizan los beneficios pero se socializan las pérdidas. Se hace ahora pagar a los pobres las excentricidades irracionales de los banqueros, y se les amenaza, en caso de que se nieguen a pagar, ¡con empobrecerlos aún más! ¿Se producirá un incendio social? No es imposible. Las repercusiones sociales del cataclismo económico son de una brutalidad inédita: 23 millones de parados en la Unión Europea y más de 80 millones de pobres. Los jóvenes aparecen como las víctimas principales. Por eso, de Madrid a Londres y Atenas, de Nicosia a Roma, una ola de indignación levanta a la juventud. Añádase, además, que en la actualidad, las clases medias también están asustadas porque el modelo neoliberal de crecimiento las está abandonando al borde del camino. En España, una parte se unió a los jóvenes para rechazar el integrismo ultraliberal de la Unión Europea y del Gobierno. "No nos representan", dijeron todos los indignados.

DK: ¿Cómo ve Europa y el proyecto común europeo dominado, estos años, por Alemania y su política de austeridad?

IR: El curso de la globalización parece como suspendido. Se habla cada vez más de desglobalización, de descrecimiento. El péndulo había ido demasiado lejos en la dirección neoliberal y ahora podría ir en la dirección contraria. Ha llegado la hora de reinventar la política y el mundo. Todas las sociedades del sur de Europa se han vuelto furiosamente anti alemanas puesto que Alemania, sin que nadie le haya otorgado ese derecho, se ha erigido en jefe –autoproclamado – de la Unión Europea enarbolando un programa de sadismo económico. Europa es ahora, para millones de ciudadanos, sinónimo de castigo y sufrimiento: una utopía negativa.

DK: ¿Hay alternativas frente al abandono del campo de batalla de la socialdemocracia tradicional?

IR: La socialdemocracia ha fracasado porque ella misma ha participado en la liquidación del Estado de bienestar, que era su principal conquista y su gran seña de identidad. De ahí el desarraigo de muchos ciudadanos que pasan de la política absteniéndose, limitándose a protestar o votando por Beppe Grillo (que es una manera de preferir un payaso auténtico en lugar de sus hipócritas copias). Otros han decidido votar a la extrema derecha, que sube espectacularmente en todas partes, o en menor grado, optar por la izquierda de la izquierda que encarna hoy el único discurso progresista audible. Así estaban también en América Latina hace poco más de un decenio, cuando las protestas derrocaban Gobiernos democráticamente elegidos (en Argentina, Bolivia, Ecuador, Perú...), que aplicaban con saña los ajustes dictados por el FMI. Hasta que los movimientos sociales de protesta convergieron con una generación de nuevos líderes políticos (Chávez, Morales, Correa, Kirchner, Lula, Lugo...) que canalizaron la poderosa energía transformadora y la condujeron a votar en las urnas programas de refundación política (constituyente), de reconquista económica (nacionalizaciones, keynesianismo) y de regeneración social. En ese sentido, se observa cómo a una Europa desorientada y grogui, América Latina le está indicando el camino.

- Cuando todos piensan igual, ninguno está pensando -

Albariza

Cita de: respublica en 23 Abril, 2013, 16:04:21 PM
En ese sentido, se observa cómo a una Europa desorientada y grogui, América Latina le está indicando el camino.

Efectivamente, en América Latina están sucediendo cosas muy interesantes de las que deberíamos aprender (si nuestra prepotencia eurocéntrica y ex-primermundista nos lo permite). Nos llevan años de ventaja en neoliberalidad y consiguiente empobrecimiento de manos de las inestimables recetas del FMI. No se trata de importar modelos, pero sí de aprender de quien está yendo por un buen camino. ¿Y quiénes van por el buen camino? Hay una manera fácil de averiguarlo: abrir una edición cualquiera de El País y ver quiénes son los malos.
La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para qué sirve la utopía? Para eso, sirve para caminar.


pressfield

Los partidos tradicionales están acabados ya que representan y viven del mismo sistema. Para mí, ya lo he dicho antres, muchas de las cosas del 15M me parecen muy correctas. Siempre he pensado que debe haber un partido, una alternativa a toda esta bazofia politica corrupta. Debe haber una esperanza, un cambio de rumbo en este pais. Y evidentemente esto no lo van a hacer los ppsoe. Ojalá todo esto se vaya consolidando de verdad en un opción política real.
Saludos.

Dru

Cita de: Albariza en 24 Abril, 2013, 06:41:09 AM
Cita de: respublica en 23 Abril, 2013, 16:04:21 PM
En ese sentido, se observa cómo a una Europa desorientada y grogui, América Latina le está indicando el camino.

Efectivamente, en América Latina están sucediendo cosas muy interesantes de las que deberíamos aprender (si nuestra prepotencia eurocéntrica y ex-primermundista nos lo permite). Nos llevan años de ventaja en neoliberalidad y consiguiente empobrecimiento de manos de las inestimables recetas del FMI. No se trata de importar modelos, pero sí de aprender de quien está yendo por un buen camino. ¿Y quiénes van por el buen camino? Hay una manera fácil de averiguarlo: abrir una edición cualquiera de El País y ver quiénes son los malos.
Pues fíjense que casualmente había colgado tan sólo unas horas antes un vídeo la mar de interesante del señor Correa, presidente de Ecuador, en el que incide bastante sobre lo que comentáis.
Si tuvieran por gusto verlo, he aquí:
http://www.ustealdia.org/foro/index.php/topic,91414.msg1063123.html#msg1063123

Salud


¡CUIDAMOS LA PÚBLICA!

'